sábado, 22 de junio de 2013

Cómo aprender en internet


A principios de 2012 decidí publicar mi primera novela. Mi bolsillo, cual varita de zahorí, me llevó finalmente a la autoedición en Amazon, pero hasta llegar ahí pasé meses y meses aprendiendo a editar, a conocer el mundillo, a elegir el formato y la plataforma más adecuadas, a cómo hacer esto y lo otro. Lo que esa vorágine no me enseñó es la importancia de ser ordenados en el aprendizaje.

Aprende a navegar por internet
Tarifa, 26 de julio de 2006.

Sí. Si no sabes nada sobre un tema es normal que al principio vayas saltando de un blog a otro leyendo decenas de entradas para hacerte una idea de lo que necesitas saber. Esa búsqueda a discreción, libre, es muy satisfactoria porque estás motivad@ y todo lo que descubres es nuevo, pero si no la acotas tu sed de conocimiento acabará por secar la ilusión. Por no decir que perderás muchísimo tiempo. A mí me ha pasado decenas de veces, de ahí que te proponga mi receta para aprender en internet.

Utiliza papel y lápiz. O boli

Sí, sí, esos instrumentos alargados con los que firmas sirven para mucho más. Aunque puede que no lo recuerdes pasaste años y años escribiendo. De hecho, pienso que hacerlo te ayuda a conectar contigo mism@. Teclea lo justo.

Toma notas

No pierdas el tiempo leyendo entradas si no tomas notas por escrito. O te organizas desde el principio o acabarás perdiendo el hilo. Si te dedicas a copiar y pegar, a minimizar una pantalla para hacer anotaciones en tu editor de textos, adiós concentración y tiempo.

Hazte un guión

Ten claro lo que quieres. Te interesa un campo determinado que se divide en decenas de temas, cada uno con sus aspectos. El campo lo tienes claro, pero al principio es muy probable que ni siquiera sepas todos los temas sobre los que has de aprender. De ahí que el primer paso es saber qué quieres o necesitas saber, valga la extraña redundancia. Puedes darte un margen de tiempo para buscar a boleo, pero no te pases: queda mucho por hacer.

Sé selectiv@

Conoces muy poco sobre ese campo, irás descubriendo cuáles son todos los temas de manera progresiva, y no hablemos ya de conocer todos los aspectos de cada tema. Si no quieres perderte recuerda esto: no es tan importante visitar cien blogs en un día como tener la habilidad de ser precisos y anotar lo que te interesa.

Sé sistemátic@

Céntrate en lo que tienes que hacer, no te disperses. En el mundo físico aprendemos dedicándole horas y horas a estudiar unos párrafos fijos sobre papel, pero en internet puedes tirarte días y días leyendo y no aprender absolutamente nada. Si ya tienes tu guión por escrito, sólo deben interesarte dos cosas: ir aclarando cuestiones y anotar los nuevos temas que habrás de abordar en breve. No vayas a salto de mata. Termina con uno y luego empieza con el siguiente.

Crea un índice de sitios

Además de tomar notas por escrito, crea un archivo en el editor de textos que uses (Word, Open Office, etc). Cuando encuentres información relevante copia la dirección url de esa página y pégala en el documento. Si le añades un comentario (aquí vi esto y era la caña,...), o le pones un número para asociar esa fuente de información a una de las notas que escribiste, mejor que mejor. Se trata de que en todo momento puedas saber dónde leíste esto o aquello. Esto parece una tontería, pero cuando pasa un mes ya no te acuerdas de cómo se llamaba aquel blog tan interesante.

Anota la matrícula de los blogs que te interesan

De nada sirve que encuentres un sitio muy interesante y que no sepas cómo volver a él de forma rápida. Los navegadores nos ofrecen la posibilidad de guardar un enlace. En Google Chrome se habla de marcadores, en Internet Explorer de favoritos, etc. Pero no vale sólo con marcarlos. No: ordénalos escrupulosamente en carpetas, cada una con su nombre correspondiente. Dedica un poco de tiempo a aprender cómo se hace esto, porque te servirá para el resto de tu vida.

Contrasta la información

Lee distintas entradas sobre un mismo tema. Como usuario de internet estás acostumbrado a leer posts originales, simples refritos o basura de corta y pega. Tú eres el nexo entre todos ellos. En la red ocurre que la responsabilidad de lo que lees y de lo que aprendes es exclusivamente tuya. Eres tú quien debes distinguir al experto de la persona que sólo tiene buenas intenciones, y a esta última del simple charlatán. ¿Ves La Noria? ¿ves El gato al Agua? ¿ves La Sexta Columna? ¿ves Salvados? ¿ves El Objetivo? Tú elijes a quién le confieres credibilidad.

Lee libros físicos

Internet nos genera la sensación, a veces inconsciente, de que navegando podemos acceder a todo lo que se sabe sobre un tema concreto. Nada más falso. Con frecuencia, tal vez con demasiada frecuencia, la búsqueda de ese Santo Grial, de ese artículo o información que andas buscando, sólo te hará perder horas y horas.

Vale que se está cómodo en casa, pero una visita a la biblioteca te puede ahorrar muchísimo tiempo. No pierdes nada por intentarlo, y por el camino tendrás la ocasión de relacionarte con otros especímenes de tu misma especie. Entre esos siete mil millones hay cientos de miles iguales a ti, no lo dudes.

Organiza tu tiempo

Fija plazos. El aprendizaje es el paso intermedio para conseguir tu objetivo final, pero hasta llegar ahí has de ir cubriendo objetivos parciales, por ejemplo, conocer en profundidad cada tema. Fija una fecha fin para acabar tu etapa de aprendizaje y reparte tu tiempo de manera equitativa. Y siempre, siempre, siempre, siempre, deja un tiempo para que todo repose.

Acabar por acabar no sirve de nada. Debes dejar que tu mente descanse unos días para luego revisar el trabajo que has hecho y detectar puntos débiles, o para navegar a boleo en busca de información más precisa sobre un aspecto concreto, sin la presión de tener que terminar.

Y hasta aquí mis diez consejos para optimizar tu tiempo y tu esfuerzo a la hora de aprender en internet. ¿Cuál es tu estrategia para no perderte en la marea?

No hay comentarios:

Publicar un comentario